Todos los castillos de Luis II de Baviera
(Hohenschwangau, Neuschwanstein, Linderhof y Herrenchiemsee)
El mismísimo Walt Disney se inspiró en la silueta almenada del Castillo de Neuschwanstein, digno de la Bella Durmiente, para identificar su mundo de fantasía, y hoy día es el símbolo por excelencia de fortaleza romántica.. Luis II de Baviera ha pasado a la historia por su carácter excéntrico (el “Rey Loco”), pero lo cierto es que la mayor región de Alemania le debe ahora ser uno de los principales destinos turísticos del país gracias a su empeño en construir castillos de cuento de hadas como el mundialmente famoso de Neuschwanstein, el encantador palacio de Linderhof, o su último sueño, Herrenchiemsee, réplica del de Versalles. Todos ellos se ubican en fascinantes emplazamientos con las montañas y los lagos de los Alpes como majestuoso telón de fondo.
Texto: PEDRO JAVIER DÍAZ-CANO
Fotos: EDUARDO GRUND
Nº de Imágenes: 115 (digital)
Para ver una selección, pulsar aquí:
(Hohenschwangau, Neuschwanstein, Linderhof y Herrenchiemsee)
El mismísimo Walt Disney se inspiró en la silueta almenada del Castillo de Neuschwanstein, digno de la Bella Durmiente, para identificar su mundo de fantasía, y hoy día es el símbolo por excelencia de fortaleza romántica.. Luis II de Baviera ha pasado a la historia por su carácter excéntrico (el “Rey Loco”), pero lo cierto es que la mayor región de Alemania le debe ahora ser uno de los principales destinos turísticos del país gracias a su empeño en construir castillos de cuento de hadas como el mundialmente famoso de Neuschwanstein, el encantador palacio de Linderhof, o su último sueño, Herrenchiemsee, réplica del de Versalles. Todos ellos se ubican en fascinantes emplazamientos con las montañas y los lagos de los Alpes como majestuoso telón de fondo.
Texto: PEDRO JAVIER DÍAZ-CANO
Fotos: EDUARDO GRUND
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